Era una mañana lluvioza,y aunque el agua me mojaba la cara, yo seguia firme ahi.
Parado en el puente.
Es increíble ver a la gentecaminar de un lado a otronadie piensa en lo que hacey nadie sabe como llego a su destino
...
La excusa fue un café, pero en realidad,
solo quería sumergirme en ese mar de
historias y anécdotas que encerraba
esta máquina del tiempo llamada:
"El Progreso" 