viernes, 4 de febrero de 2011

Libelula

Desde niño siempre creí, que cuando los aguateros volaban cerca del agua
O entre los pastizales, una tormenta estaba por venir. Ya de en mi adolescencia,
descubrí que los aguateros en realidad eran libélulas, y que nada tenían que ver con la lluvia.
Este ultimo descubrimiento me hizo sentir medio tonto, aunque lo cierto es que de tonto
no creo tener nada, y aunque la inocencia y capacidad de asombro cada vez es más escasa;
Yo sigo apostando a la pureza y lo sencillo, a lo inocente y sorpresivo,
yo sigo creyendo que la hermosura esta en las pequeñas cosas que nos asombran.
Yo creo aunque me digan tonto, vos... Crees?